viernes, 3 de abril de 2009

La Abulia I

El ocio es una cualidad filosófica. La filosofía nace porque hubo ocio. El ciudadano ateniense enriquecía el momento de ocio con la reflexión, la vida contemplativa. El ocio, en ese momento, era un privilegio de la élite ateniense. El esclavo jamás tenía un tiempo de ocio. El tiempo libre y el ocio no son sinónimos: uno es la condición de posibilidad del otro. Cuando hablamos de tiempo libre es el tiempo "sin trabajo". Cuando hablamos de ocio es el tiempo libre creativo, dedicado a labores de alto vuelo, del espíritu. Aquello fue Atenas. Pero en la "atenas del nuevo mundo", el ocio es malvisto, hay que hacerse el "chivo loco" para tener un momento de ocio y pensar, callar, imaginar, echar a volar el espíritu. La próxima semana (la semana santa) es un buen momento para el ocio; dignifiquemos ese tiempo libre.